Donald Trump, el primer expresidente en enfrentar imputaciones penales en la historia de Estados Unidos, se encuentra involucrado en tres graves casos legales. En el primero, conocido como el caso ‘Stormy Daniels’, Trump está acusado de orquestar un pago encubierto de 130,000 dólares a la actriz porno Stormy Daniels para silenciar una relación extramatrimonial durante la campaña electoral de 2016. En el segundo caso, se le imputan 37 cargos por retener documentos clasificados tras dejar la presidencia en enero de 2021, conocidos como los ‘papeles de Mar-a-Lago’. Por último, Trump enfrenta acusaciones relacionadas con su papel en la incitación al asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021, con cargos que incluyen conspiración, manipulación de testigos y obstrucción de procedimiento legal. A pesar de estas imputaciones, Trump aún puede presentarse a la reelección y ser elegido nuevamente como presidente.
Estos tres casos penales representan un hito sin precedentes en la historia política de Estados Unidos, ya que el exmandatario se enfrenta a cargos de delitos federales que abarcan desde asuntos financieros y violación de normas electorales hasta su presunta participación en el asalto al Capitolio. Aunque enfrenta serias acusaciones, estas no impiden que Trump pueda buscar la reelección en el futuro ni le prohíben ser elegido nuevamente como presidente. A medida que estos juicios se desarrollan, se espera un escrutinio público intensificado sobre la conducta pasada y las implicaciones legales del exlíder estadounidense.
