El magistrado Carlos Alberto Calderón, representante de Santa Cruz en el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), presentó su renuncia luego de enfrentar fuertes críticas por la decisión del órgano de prorrogar su mandato hasta la realización de nuevas elecciones judiciales. Calderón asegura que la decisión fue malinterpretada y tergiversada, generando reacciones negativas en diversos sectores de la sociedad boliviana.
La renuncia de Calderón, que tiene carácter irrevocable, se produce en un contexto de tensiones y cuestionamientos a la decisión del TCP, que también enfrenta la posibilidad de juicios de responsabilidades. La determinación de ampliar el mandato de los actuales magistrados generó controversia y críticas desde distintos sectores políticos y sociales.
Este hecho coincide con el término legal del mandato de los actuales magistrados, quienes fueron posesionados el 2 de enero de 2017. Según la normativa vigente, su periodo de seis años concluyó el martes. La decisión del TCP insta a la Asamblea Legislativa a aprobar una nueva ley de convocatoria y preselección de candidatos para las elecciones judiciales. Estos comicios estaban originalmente programados para 2023, pero diversas dificultades y falta de consenso en la Asamblea impidieron su realización.
