En el quinto día sin reportes de incendios forestales en algunas regiones, el Viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, anunció el éxito de las operaciones de respuesta en Bolivia. Un total de 9,325 familias han sido atendidas, con la entrega de 225.75 toneladas de ayuda humanitaria, representando una inversión de Bs. 1,986,743.
Siete departamentos fueron afectados, siendo Beni el único en declararse en desastre departamental. Veinte municipios, incluyendo comunidades indígenas, sufrieron daños, con 55 viviendas destruidas por el fuego.
El Comando Conjunto de Respuesta Ante Eventos Adversos (CCREA) desplegó un impresionante esfuerzo, sofocando 160 incendios forestales, movilizando 5,605 bomberos y empleando 7 helicópteros. Con 991 descargas de agua y 1,239,950 litros utilizados, la magnitud de la respuesta fue notoria.
El Plan de Evaluación Multisectorial, con la participación de varios ministerios, busca la reposición de daños en infraestructuras y la identificación de lugares para perforar pozos. Brigadas médicas, solidaridad internacional y la entrega de ayuda humanitaria coordinada con gobiernos municipales son parte de este plan en marcha.
Destacando la solidaridad internacional, Chile envió casi tres toneladas de ayuda, mientras que bomberos de Venezuela y Francia se sumaron a las operaciones en la zona de la Chiquitanía.
En un enfoque firme contra la irresponsabilidad, se anunció que quienes provoquen incendios enfrentarán penas endurecidas de hasta 8 años de privación de libertad.
La respuesta integral y la colaboración internacional son testigos de un esfuerzo coordinado para mitigar los impactos de los incendios y apoyar a las comunidades afectadas en Bolivia.
